domingo, 25 de noviembre de 2012
La balanza
Si hablamos de la balanza, hay muchas cosas que podríamos poner en ella, desde pesos hasta sentimientos,sin olvidarnos de que todo el mundo en algún momento hace balance de su vida.
Esto siempre me ha hecho mucha gracia, porque por mucho balance que hagas el pasado no lo puedes cambiar, pero me imagino que es para no cometer errores en el futuro. Yo me equivoco mucho pero la verdad es no me importa, probablemente porque pienso más en el presente que en el futuro.
Una de mis lectoras del blog me comentaba desesperada que intentó hacer la receta de las galletas económicas y no le salieron todo lo bien que esperaba.
Estas recetas son antiquísimas, es más parecen pergaminos, por lo cual tenemos que buscarle el punto.
Una libra son 460 gramos, pero tenemos que tener algo en cuenta. Hace 100 años no compraban harina en la tienda, iban al molino y la molían, esto cambia mucho el cuento, eran harinas más gruesas de ahí que siempre tamizaran todo.
Otro punto a tener muy en cuenta era el horno y los moldes donde horneaban. Eran hornos de leña y los tiempos de cocción no tienen nada que ver con nuestros hornos modernos, con aire, turbo...y los moldes eran latas.
Si hablamos de las natas, mantequillas y mantecas todas caseras y de muy pura calidad, tenemos que tener en cuenta que no solo cambia el sabor si no también la textura de la masa.
Otra aclaración que tengo que hacer, me pregunta por la harina de hojaldre, es harina de fuerza de primera calidad. Yo recuerdo a mi abuela que preparaba las magdalenas con bicarbonato en vez de royal, me imagino porque aún no existía
Tenemos que adaptar las recetas a la vida actual y usar un poquito el sentido común (a mi lo del sentido común no me gusta nada) pero creo que en estas recetas es necesario.
Hoy os dejo una receta de buñuelos, es básica pero como todo lo sencillo buenísimos.
BUÑUELOS
En un recipiente de porcelana se colocan setenta gramos de manteca de vaca, añadiéndole dos vasos de agua suficientemente templada para que derrita la manteca , e incorporándola poco a poco para que no se formen grumos añadimos 250 gramos de harina y punto de sal.
Esta pasta no debe de estar ni demasiado espesa, ni demasiado clara, y además ha de ser completamenten lisa.
Se fríen en abundante aceite se dejan en papel absorbente y se espolvorean con azúcar y canela.
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